La capital española tiene el privilegio de albergar a Sobrino de Botín, el restaurante más antiguo del mundo. El reconocimiento le fue otorgado en 1987 por el libro Guinness de los récords, pues lleva en activo casi 3 siglos, sin cambiar de ubicación y sin cerrar un solo día, ni durante la Guerra Civil.
Su apertura tuvo lugar en el año 1725 de la mano de un cocinero francés llamado Jean Botín y su esposa asturiana.
Si bien es conocido como Casa Botín o Restaurante Botín, en su fachada se puede observar el letrero “Restaurante Sobrino de Botín”, pues tras el fallecimiento de sus fundadores, el negocio pasó a manos de Cándido Remis, un sobrino de la Sra. Botín.
ESPECIALIDADES, FAMOSOS Y ACTUALIDAD
Las especialidades que se sirven en el local se fundamentan en la cocina castellana y madrileña, siendo muy afamado el cochinillo asado y cordero asado que se prepara en su antiguo horno de leña.
Sobre el restaurante Sobrino de Botín hay un puñado de historias circulando. Incluso una de ellas habla acerca del famoso pintor y grabador español Francisco de Goya, en la que se dice que trabajó en este establecimiento como camarero y friegaplatos cuando apenas tenía 19 años. Además se cuenta que el escritor y periodista estadounidense Ernest Hemingway visitaba las instalaciones cada vez que viajaba a Madrid.
Además de ellos, otras celebridades como el escritor británico Graham Greene y el político español Indalecio Prieto disfrutaron en sus tiempos de la gastronomía de Sobrino de Botín.
En la actualidad el restaurante está dirigido por la tercera generación de la familia González, Antonio y José González. Ubicado en el corazón de Madrid, cerca de la Plaza Mayor, ahora Sobrino de Botín tiene cuatro pisos que conservan los interiores originales del siglo XVIII, así como la fachada de ladrillo y el horno de leña original.
En la ventana frontal se puede ver el certificado original de Guinness World Records firmado por Norris McWhirter.