Recientemente, una mujer de Madrid ha conseguido recuperar la considerable suma de 12.200€ en intereses pagados de más tras reclamar a la entidad Wizink por una tarjeta revolving a través del despacho de abogados especializado Reclamapormi.com
Las tarjetas revolving, conocidas por sus altos tipos de interés, han sido objeto de miles de reclamaciones en los últimos años. En este caso, el juez decidió declarar nulo el contrato por la falta de transparencia en el contrato de la tarjeta.
Ella ya ha conseguido librarse de su deuda, pero aún hay muchas personas con tarjetas de este tipo. Sin embargo, al pensar en contratar un despacho de abogados para reclamar, algunos clientes potenciales pueden tener dudas. Aquí respondemos a tres posibles pegas que podrían surgir:
- Costes Asociados a la Reclamación: Muchos se preocupan por los costes que puede suponer contratar a un abogado. Sin embargo, es importante destacar que hay despachos, como Reclamapormi.com, que trabajan con un modelo de «no win, no fee», es decir, solo cobran si se gana el caso. Esto significa que el riesgo financiero para el cliente es mínimo, ya que solo pagará si se recupera dinero.
- Tiempo de Espera para Obtener Resultados: Otro temor común es el tiempo que puede llevar el proceso de reclamación. Es comprensible que los clientes quieran una resolución rápida. Sin embargo, el proceso legal depende en gran medida de los juzgados y a menudo requiere paciencia. Un buen despacho mantendrá informado al cliente en cada etapa del proceso y trabajará de manera eficiente para lograr el mejor resultado en el menor tiempo posible.
- Desconfianza en el Proceso Legal: Muchos se sienten intimidados por el sistema legal y dudan de su capacidad para reclamar. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la mayoría de los casos que se llevan a juicio por un despacho especializado terminan siendo exitosos. Además, al hacerlo a través de un abogado, te despreocupas de casi todo el papeleo.
Si te encuentras en una situación similar, no dudes en buscar asesoría legal. Los derechos de los consumidores deben ser defendidos y, con el apoyo adecuado, es posible obtener resultados positivos.