Hay muchas alternativas disponibles a la hora de solicitar un préstamo. Tantas que a veces resulta difícil decidir cuál es la opción más conveniente respecto a intereses, condiciones y otros factores. En este artículo te compartiremos información importante que debes considerar antes de solicitar uno.
Este tipo de trámites implica que una entidad financiera (que puede o no ser un banco) otorgue un determinado capital a una persona, por diversos motivos o fines. Al tratarse de un préstamo que se le hace al usuario, quien recibe el dinero se compromete a devolver la suma facilitada en un tiempo y con ciertos parámetros como porcentaje de intereses, cantidad de cuotas, multas o mora por cuotas impagas, entre otros.
Utiliza un comparador
Sin importar el tipo de préstamo que se necesite, siempre es recomendable comparar todas las alternativas del mercado, para poder tomar una decisión informada y acorde a las necesidades (y al presupuesto). Un aliado virtual para esto es Pynta, un comparador de préstamos online que enlista todos los detalles de cada opción disponible.
Este tipo de herramientas permite visualizar la información completa de cada alternativa ofrecida por bancos líderes y otras entidades financieras, brindando listas comparativas útiles y detalladas. De esta manera se puede evaluar, una a una, cada opción.
Pregunta todo lo que necesites
Después de estudiar las opciones del mercado y de haber elegido la (o las) opciones de préstamos personales, debes contactar a la entidad prestamista para resolver todas las dudas que tengas. Es muy importante recordar que se trata de un compromiso a corto, mediano o largo plazo, que puede tener repercusiones en el futuro.
No debes solicitar préstamos cuyas condiciones o tasas de intereses no estén acorde a tus posibilidades de pago, ya que es bastante probable que termines con una deuda superior a la inicial y que no tengas la capacidad de pagarla.
Consulta por referencias, haz preguntas, evalúa los escenarios posibles y piensa muy bien antes de solicitar un préstamo, especialmente si se trata de importantes cantidades de dinero.
Ten la calculadora a mano
Un prestamista no es un cajero automático con fondos infinitos y sin condiciones. Si se realiza una solicitud de este tipo, siempre –o casi siempre– conllevará intereses. Es por esto que hay que ser conscientes y matemáticos a la hora de realizar el trámite.
Mes a mes hay que pagar una tarifa fija que consta de un porcentaje de la deuda adquirida más los intereses acordados. Esto significa que al final del proceso se devuelve un monto superior al del inicio, a la entidad financiera. ¿Por qué es esto es importante? Porque las personas suelen olvidarse de estos cobros adicionales, y terminan comprometiéndose a pagar cuotas que no van a acorde a sus ingresos mensuales y/o anuales. También puede ocurrir que, en el momento de evaluar el préstamo, este resulte poco conveniente o muy caro al sumarle los intereses correspondientes.
Por eso es importante tener a la mano una calculadora, un asesor, o una herramienta comparadora, que ayude a evaluar las alternativas posibles. De esta manera se puede tomar una decisión financieramente inteligente.